A pocos días del (¿inútil?) partido de la Selección Argentina ante Ghana, presentamos en esta segunda entrega al mejor jugador ghanés de la historias (más allá de que O Rei Pelé hable de su homónimo Abedí Pelé) : Michael Essien. El volante central del Chelsea inglés ha tenido un crecimiento meteórico, y aquí repasamos los momentos más destacados de su carrera.
Nacido en Accra, la capital de Ghana muy pronto se ligó al fútbol. En lo que en tiempos de la colonia inglesa era la Costa de Oro debido a la producción de metal aurífero, tierras productora de materias primas como aceite de maní (en las costas) y que fue dividida por los colonizadores europeos como espacio étnico de Ashantis y Fantis (divisiones absolutamente artificiales y producto del desconocimiento de los invasores), comenzó a despuntar el vicio Essien. El Liberty Proffesionals de su ciudad natal fue la primera institución que lo cobijó, cuando no era más que un adolescente.
A la vez que se desarrollaba allí, el Sub 17 en 1999 lo tuvo como una de sus figuras. En el 2001, en el Sub 20 en Argentina el Bufalo fue uno de los mejores jugadores del certamen, donde Ghana salió subcampeón tras caer en la final ante el equipo de José Pekerman pero luego de haber derrotado a Brasil, que contaba con Ricardo Kaká en sus filas.
Ya en el 2000 había arribado al fútbol europeo, más precisamente al Bastia francés, luego de haber declinado propuestas desde Bélgica. En el conjunto galo logró continuidad en su segundo año en el equipo; allí comenzó a mostrarse no sólo como un volante defensivo sino que le agregó a su juego la variante en ataque. Tras haber alcanzado la final de la Copa de Francia, los grandes de ese país se lo disputaban.
Tras la ida de Ronaldinho al Barcelona, el PSG tenía dinero fresco y necesidad de renovarse, pero Essien desechó la propuesta de los parisinos, porque no habían clasificado a la Champions League en aquel 2003. Por esa misma razón prefirió al Lyon, a pesar de que ofrecía menos dinero. se convirtió en un eje crucial del multicampeón equipo de Jean Michel Aulas. Rueda de auxilio junto a Mahmadou Diarra para que Juninho Pernambucano pueda exhibir su valía, ya los grandes del continente se lo disputaban.
Fue el Chelsea, el que en 2005 se lo llevó tras pagar un dineral: 40 millones de euros. Allí, secundando a otros grandes como Frank Lampard, Michael Ballack y Joe Cole. A pesar de alternar entre la zaga central y el mediocampo, Essien ostenta dos records muy positivos con los Blues: tanto en el 2006/2007 como en el 2008/2009 goles suyos fueron elegidos como los mejores de la temporada del Chelsea. El primero fue ante el Arsenal y el segundo ante Barcelona, en la caída en las Semis de Champions. Si bien se le han negado a los de Abramovich los logros continentales, sí han podido obtener más de un título a nivel local.
Yendo al plano nacional, su aporte con la Selección fue vital para que Ghana pueda lograr su primera clasificación a un Mundial en 2006. En Alemania incluso accedieron a cuartos donde cayeron ante Brasil. Pero no terminó todo esto allí, ya que en Sudáfrica está asegurada la presencia de Ghana. Elegido como el onceavo mejor jugador africano de la historia, los logros de Essien parecen destinados a no detenerse.
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